Nintendo ha dado en la tecla con
la nueva Wii U, una consola de juegos que al final es más una completa central de entretenimiento doméstica que un simple disparador de juegos. El cambio más evidente respecto a la versión tradicional es el GamePad, una especie de tableta que –aunque no jubila– deja en la categoría sénior al mando anterior de Wii y definitivamente en la prehistoria al viejo y querido joystick.
En el centro de la casa
La Wii U tiene la capacidad de entretener a toda la familia y le cuesta muy poco posicionarse como reina absoluta del living. El secreto del éxito radica en el software y, claro, en el GamePad.
Cuando la consola se enciende –viene en dos versiones: de 8 y 32 GB– se nota una clara mejora respecto a la interfaz anterior, que tenía muchas promesas y varias lagunas.
En la nueva versión todo es más fácil e intuitivo. Por ejemplo, navegar en internet es muy sencillo, en especial porque si antes había que escribir en la pantalla de la TV con el puntero del control, ahora se teclea sobre la pantalla del GamePad, infinitamente más cómodo que escribir en un smartphone por ejemplo. Para empezar a navegar basta con conectarse a la red inalámbrica del hogar, ingresar usuario, contraseña y listo.
La mejora visual también redunda en que se pueda explotar al máximo Netflix, aplicación que ya viene integrada. Los que estén abonados al servicio solo deben loguearse. El resto de los usuarios pueden aprovechar el mes de prueba gratis y así acceder a este servicio online de películas. Una conexión normal de internet basta para obtener una óptima calidad de imagen y reproducción.
Por otra parte, la Wii U también permite transformar el GamePad en el control remoto de la televisión. Llegado este punto, el control abdicará en favor del nuevo mando de la Wii, que se convertirá en monarca absoluto del living.
Claro que esta nueva situación puede causar alguna que otra revuelta, en especial cuando algunos integrantes de la familia quieran ver la tele y otros, por lo general los más chicos, quieran seguir jugando. Aunque parezca contradictorio, el propio GamePad hará las veces de pacificador, porque su pantalla de 6,2 pulgadas también permite que el usuario pueda jugar sin necesidad del televisor.
Nuevas fronteras
El centro de la experiencia lúdica de Wii U está en Nintendoland (ver recuadro), un paquete de juegos dirigido a los más chicos, que, dicho sea de paso, son los que menos problemas tienen a la hora de descubrir los secretos del nuevo mando.
Pero tampoco se trata de una dictadura infantil. La cantidad de juegos disponibles es muy amplia y contempla a los amantes de los deportes y la acción. Sin embargo hay algunos juegos que aprovechan mejor que otros las nuevas posibilidades de la consola. El mejor ejemplo es ZombiU (ver recuadro), que deja los pelos de punta, explotando al máximo las funciones del GamePad.
A través de la pantalla del nuevo comando, el jugador puede vivir una profunda experiencia de inmersión y, al moverse por la habitación mirando la pantalla, se tendrá la impresión de estar descubriendo una realidad tan paralela como divertida.
Este punto es interesante porque cuando se lanzó este modelo de consola daba la impresión de que Nintendo daba un paso atrás, hacia una forma de juego más convencional. Sin embargo, con el resultado a la vista, es evidente que es todo lo contrario. Primero porque la gestualidad sigue siendo el motor de las acciones en los diferentes juegos y, segundo, porque la pantalla permite jugar con la realidad aumentada.
El mejor ejemplo en este sentido es Wii Street, una aplicación que permite caminar por las calles de diversos puntos del planeta utilizando el servicio StreetView de Google. A lo largo de 2013 se espera el lanzamiento de otras apps que exploten esta faceta de Wii U.
Juego social
Si uno quiere ser un ciudadano de primera en este reino de la diversión, es conveniente que se tome la molestia de crear un avatar. Estos personajes –muy personalizables, por cierto– se llaman Miis y son la piedra angular de Miiverse, una especie de red social donde jugadores de todo el mundo pueden comunicarse participando de foros, enviándose mensajes directos o incluso interactuando mientras están jugando.
La llamada plaza WaraWara es el lugar ideal para encontrarse con otros usuarios de Wii. A medida que el avatar propio se va cruzando con distintos jugadores, se puede seleccionar un interlocutor, ver su datos y qué títulos ha jugado. Como en cualquier red social, en caso de encontrar afinidad, se lo puede agregar como amigo.
Puede suceder que al leer esto le parezca que algunas funciones son complejas, pero en esta consola todo es muy intuitivo. Pero, por si acaso, el usuario también cuenta con un personaje –virtual, claro– que lo guiará en el idioma propio por los recovecos del universo Wii U. Esto, además de útil, puede resultar particularmente entretenido para los más chicos.
En medio de la proliferación de smartphones y tabletas que cada vez pisan más fuerte en la comarca de los juegos, Nintendo buscó reinventarse y crear nuevos horizontes. Parece haber reencontrado un nuevo y céntrico lugar dentro de los hogares.
Fuente :
http://www.cromo.com.uy
Conoce el Nuevo Nintendo Wii U